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La Fundación Carmen Gandarias colabora con La Fundación Fontilles desde 2024, en la financiación de un proyecto integral de acogida, manutención y atención sanitaria de menores discapacitados en la República Democrática del Congo.

La obra más importante de esta institución es el sanatorio de Alicante, una antigua leprosería que ahora es un centro geriátrico con 84 plazas, concertado con la administración pública. No obstante, aunque ya no quedan enfermos de lepra residentes, siguen atendiendo los casos que llegan de personas con enfermedad de lepra, en modo ambulatorio o con residencias temporales (normalmente, personas extranjeras residentes en zonas endémicas o personas españolas que han contraído la enfermedad en alguna zona endémica de lepra), y son también un centro de referencia internacional como laboratorio de investigación y análisis de diagnóstico de la enfermedad, así como en cuanto a formación sanitaria sobre la lepra. 

El 8% de sus recursos económicos son destinados anualmente a apoyar proyectos internacionales de lucha contra la enfermedad de la lepra y desarrollo de comunidades en situación de extrema necesidad y pobreza. A ello destinan, aproximadamente, 1 millón de euros al año, con fondos que proceden tanto de instituciones públicas, como de personas e instituciones privadas, como es el caso de los fondos privados procedentes de una red de más de 3.000 personas donantes que aportan cuotas a la Fundación.

Actualmente la Fundación Fontilles tiene 24 programas de cooperación internacional abiertos, la mayoría en India, contra la enfermedad de la lepra; en Bolivia, con 4 proyectos de lucha contra la enfermedad de chagas y salud pública; África, en la RD Congo, contra la desnutrición infantil y atención de discapacidades y Brasil, contra la lepra.

La Fundación Carmen Gandarias está apoyando el proyecto Alimentación y Atención Sanitaria a menores discapacitados en el Centro Heri Kwetu, en la República Democrática del Congo, con una financiación aprobada por espacio de dos años, 2024 y 2025. Es un proyecto dirigido a la atención social y sanitaria de menores, de hasta 18 años, descendientes de familias en situación de grave exclusión, en situación alta vulnerabilidad, con carencias alimenticias y que padecen discapacidades psíquicas y físicas, así como malformaciones congénitas, consecuencias físicas de la polio o la lepra y heridas por la guerra y minas antipersona. El proyecto se desarrolla en el Centro Heri Kwetu, ubicado en la localidad de Bukavu, provincia de Sud-Kevu. Se trata de un centro polivalente, regentado por la Congregación de las Hermanas de la Compañía de María, que opera bajo la cobertura legal de la Archidiócesis de Bukavu.